Silencio y meditación en La Pampa
[icon name=»quote-left» class=»» unprefixed_class=»»]En un clima de silencio, atención contemplativa y quietud, pudimos experimentar el vaciarnos de nuestro ego para ser habitados por el Espíritu. Vaciarnos nos permite despersonalizar cientos de sensaciones, pensamientos y pasiones, vaciarnos de velos, de sesgos y parcialidades.
Pensar y actuar en pos de vaciarnos es en sí un acto de esperanza, revive la Gran Confianza que nos recuerda que el cántaro que somos se llenará de gracia y de luz al momento que logremos desprendernos de todo lo que no somos verdaderamente. No podemos incorporar nada sin vaciarnos primero, no podemos nacer a la Vida sin antes morir, no podemos estar en este camino de profundización espiritual, sin morir una y otra vez, cada día en la simpleza, silencio y soledad de nuestra meditación.[icon name=»quote-right» class=»» unprefixed_class=»»]