La Congregación

Comisión de Cuidado y Protección

“Amen con incansable magnanimidad a los niños y niñas, acompañando las palabras y los gestos siempre con dulzura y prudencia” (Elmina Paz. Carta a las Hermanas. Dic, 1897)

Nuestra Fundadora, quien se comprometió con su vida toda al cuidado y protección de la niñez más desfavorecida, en reiteradas ocasiones se dirige a todas las hermanas recomendándoles la delicadeza y caridad con las que debían tratar a los más pequeños. Las instaba sobre todo a la misericordia y la paciencia, emanadas del fuerte amor a Dios. Su especial dedicación y cuidado hacia la niñez, nos sigue inspirando actitudes de compasión y justicia.

Dentro de la misión evangelizadora de la Congregación, ocupa un lugar importante la tarea con niños, niñas y adolescentes, ya sea en los ámbitos educativos y/o acciones solidarias en cualquiera de sus formas. Por ello, queremos cada vez más rechazar toda forma de violencia y daño a otro/a hermano/a.

En este sentido, es prioridad absoluta la protección de los niños, niñas, adolescentes y personas vulnerables siendo ellos el centro del Evangelio y los grupos más vulnerables de la sociedad.

Sentimos la responsabilidad de promover el despertar de la conciencia para hacer de nuestras comunidades, colegios y otros centros de predicación, lugares seguros, donde el conjunto de personas adultas siempre se comporte en servicio del interés superior del Niño/a y el respeto a sus derechos. El entorno seguro y protector es, por lo tanto, la condición imprescindible para garantizar el derecho de cada Niño/a a su desarrollo pleno y a la protección”. 

La Comisión de Protección a la Infancia nombrada por la congregación, asumió el desafío de animar en las comunidades educativas y en todos los espacios educativos más vulnerables donde estamos trabajando las hermanas junto con laicos y laicas, capacitaciones y acciones a favor de hacer de nuestras casas lugares seguros para los niños, niñas, adolescentes y personas vulnerables (NNAyPV).

 

También es nuestro deseo continuar tejiendo redes de protección y prevención, de cuidado, de promoción y defensa de sus derechos, así como compartir estrategias de prevención.

Así mismo, escuchamos el llamado de la Iglesia a mirar de frente este fenómeno intolerable del abuso infantil, (físico, emocional, sexual y negligencia) “promover comunidades capaces de luchar contra situaciones abusivas, comunidades donde el intercambio, la discusión, la confrontación sean bienvenidas. Seremos fecundas en la medida que potenciemos comunidades abiertas desde su interior” y, de este modo, sumar nuestras fuerzas para dejar de favorecer la atmósfera y la cultura del abuso en el seno mismo de la comunidad eclesial.

En el Protocolo Congregacional están explicitadas las funciones de la Comisión junto con el compromiso que deben asumir todos los actores institucionales ante estas posibles situaciones. 

Esta política Congregacional nos involucra a todas/os. Promover acciones de sensibilización, concientización sobre la cultura del buen trato, la importancia de la construcción de entornos protectores en nuestros colegios y potenciar las acciones educativas de prevención.

La promoción y defensa de los derechos de NNAyJ, es una responsabilidad de todas/os. 

 

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Delegada congregacional de protección y coordinadora de la comisión

Miembros de la comisión

Por consultas o denuncias, comunicarse a comisionproteccion@dominicastuc.org