Experiencia del taller de interioridad para familias en Rosario
En el colegio Santísimo Rosario, de la ciudad de Rosario, este año, junto al equipo conformado por la Hna. Daniela Cerutti, las docentes Marta Corna y Claudina Pérez; comenzaron con el desarrollo del taller de interioridad, no solo con los estudiantes sino con las familias de los mismos.
En la última semana de junio y a principios de julio, se dio inicio a los espacios con las familias, donde se compartieron vivencias y se abrió el corazón a otros.
Pudo apreciarse claramente cuánto gustó la propuesta y se abrirá un espacio para adultos.
Esto demuestra que trabajar en la interioridad es esencial porque promueve el desarrollo emocional, social, personal y el encuentro con Dios en lo profundo del corazón. Esto permite gestionar las emociones, mejorar el bienestar mental, fortalecer la autoestima y descubrir la riqueza del silencio interior.
Tal como hacía Jesús, y tan claramente nos lo recuerda el Papa Francisco:
“Estamos hablando de (cultivar) una actitud del corazón, que vive todo con serena atención, que sabe estar plenamente presente ante alguien sin estar pensando en lo que viene después, que se entrega a cada momento como don divino que debe ser plenamente vivido. Jesús nos enseñaba esta actitud cuando nos invitaba a mirar los lirios del campo y las aves del cielo, o cuando, ante la presencia de un hombre inquieto, «detuvo en él su mirada, y lo amó» (Mc 10,21). Papa Francisco, Laudato Si.
Sin duda, cultivar la interioridad en la escuela y en especial la apertura a la trascendencia, tiene que ver más con el cómo hacer las cosas, con qué ritmos, con qué calidad de atención y presencia, qué importancia se le da a los vínculos, cómo se cuidan los comienzos y los cierres de los procesos, como se aborda la estética de los espacios.
Un gran desafío para dar lugar a un gran paso, muy necesario en estos tiempos tan convulsionados que nos toca transitar…