Retiro de Cuaresma en Tucumán
A continuación, nos comparten lo vivido estos dos días de encuentro en San Pedro de Colalao.
[icon name=»quote-left» class=»» unprefixed_class=»»] Situadas en un espacio en común fuera del ambiente de las actividades habituales, hemos reflexionado sobre distintos aspectos para un estado espiritual propicio en el tiempo de Cuaresma. Los ejes temáticos, variados y ricos, han centrado la atención en los siguientes aspectos:
1- La espera de Dios: lograr encontrar en nuestro corazón lo que el alma nos podría transmitir para salir de nuestro egoísmo y podernos proyectar en
«nosotros». Somos un proyecto de Dios, por ello estamos llamadas a deconstruir el “Yo» para replantearnos el sentido verdadero del SER, que constituye la libertad, la igualdad, la justicia, la caridad, es decir HACER Y ESTAR.
Pensar en el “somos», es pensar en el camino de santidad común de la iglesia.
2- Reflexionamos sobre el sentido de recuperar la seguridad que nos brinda el camino que recorremos en Dios; recrear los distintos momentos que hemos vivido y fortalecer las actitudes que los tiempos actuales requieren para transitar el día a día y hacer crecer la Iglesia.
Volver a la fuente con palabras concretas que demuestran una comunidad viva, activa y actual. No debemos dormirnos, debemos proponernos en actitudes y acciones que no transmitan una iglesia adormecida, estancada, sino que estamos llamadas a ser activas en cada realidad eclesial, social, barrial que se presenta en estos tiempos cambiantes e injustos.
3- La proyección de la película Los Coristas ha dejado, entre tantos, el mensaje de que frente a la violencia del rigor, el maestro sabe descubrir el valor, las virtudes o los talentos del alumno y los expone, aunque sea el precio de una retirada.
4- EI Vía Crucis meditado fue un momento fuerte de comunión. El significado del signo de la luz y el agua para recorrer las estaciones y redescubrir la misión de María que dio a luz al Salvador y María que recibe al Cristo bajado de la cruz, fue algo hermoso.
En el recorrido hemos descubierto cómo cada personaje somos nosotras y cómo cada imagen del crucificado puede ser la nuestra para los demás en muchas ocasiones. Figuras como el Cireneo y la Verónica son representativas para un llamado a nuestro permanente servicio.
5-EI rezo del rosario fue el momento de compartir las experiencias de lo vivido y plantearnos algunos propósitos para sentir un corazón renovado y vivo.[icon name=»quote-right» class=»» unprefixed_class=»»]
